Ir al contenido principal

Distancia.



“Imagino algún tiempo y espacio distintos, en los cuales tu voz rompa este silencio. Es que me cuesta, pero sobrevivo con penosa dificultad a tu recuerdo y al sabor amargo de enfrentar mis actos cotidianos sin saberte de mi mano, sin mirar a mi lado y encontrarte y encontrar la paz.
Es cierto, sobrevivo las ausencias, aunque no las admito, aunque no te resigno. Es cierto que tus miradas y sonrisas me duelen, duelen en lo lejos y desnudas de razón (aparente). Pero desde el sur profundo de tu mirada, me llega la suave brisa de algo parecido a la salvación y quiero verte y besarte y hacerte sonreír se vuelve una cuestión de vida o muerte; sentirte tan mía como creí aquella vez en que la ciudad fue testigo silenciosa de nuestra propia, pequeña, infinita historia…
Y pienso –en noches así me da por pensar(te)- que quizá, tal vez el amor sea eso: todo lo que pasa por el prisma de tus ojos, quizá lo sea nuestros encuentros, una vez cada demasiado tiempo; vos, yo, nuestras obligaciones y pasiones. Vos allá en la gran ciudad y yo acá, preso en mis desvelos.

Me siento preso por recordar tu risa y tu 'locura linda'. Elijo deliberadamente una gran ciudad en la cual te imagino, pero como un recurso, porque es inmensa la distancia esta noche, porque no son las cuatro paredes de esta habitación las que nos encierran y nos funde en uno, y nos acerca y nos aleja, rompiendo silencios, hablando a través de las miradas. Sos libre de todo y a la vez todo últimamente pasa a través de ese rito de extrañarte. Sin embargo, acá estamos: vos allá, sin saber nada; y yo acá, creyendo que quizá podamos destruir la distancia que –a esta altura de la noche- parece eterna, podamos recibirnos y revivirnos en algo más que esas sonrisas y abrazos y anécdotas y sentirme parte de vos. Intima, cercana y esta vez para mí, para reconocernos y hacernos felices, para creer que todavía existen esas miradas que detienen el tiempo, que desnudan el alma; mi alma frente a tu tan extrañada presencia…”

FIN
Un Cronopio

Comentarios

Entradas populares de este blog

Avisos parroquiales

Voy a anunciar mi suicidio Sabrán el arribo del día final  En el que la pesada bruma deje de aplastarme Cuando los grilletes de la tristeza aflojen, por fin,  su implacable mordaza. Al alba de la última jornada cuando sea definitivamente nulo  el poco disfrute del que gozo Y el día y la noche el verano, el invierno, el ruido  y el silencio  me sean por completo indiferentes apagaré la última (y ya débil) llama He decidido dar fin al último acto, que el telón de la obra mediocre que fue mi vida se cierre, Deshabitada la sala,  Oscuros los pasillos y que todo, finalmente todo, sea abarcado  por la quietud insobornable de la muerte. Voy a anunciar mi suicidio No habrá ya espacio para el llanto Sólo lentas y cansadas campanas que resuenen en el llano anochecer  Cuando el sol se apague en el horizonte  se bombeará el último hilo de sangre  y cruzará por mi rostro  la última de las lágrimas, Como en ese juego de niños  Basta para mí,...

Espectadores

Ahí están, al otro lado del mundo  lejanos como montañas coléricos mares embravecidos que no entienden, y está bien que así sea,  que permanezcan ajenos que no sean parte aunque suene egoísta. Miran distantes, tal vez hablen pero este es el límite  murallas que se alzan, puentes que, por una vez, no se tienden         es preferible que así sea. De este lado dos almas que se miran y miran la noche Existen en un cubo estrellado  Íntimo. Dos manos que casi se rozan Titubean se acercan se repelen se vuelven a buscar Todo en perfecta calma Hora tras hora Engranaje del tiempo que lento rueda [La brasa del cigarrillo En tus dedos  El humo que sale de tu boca Floral, denso, intenso] Solo espero y deseo que este silencio que hoy aturde y nos separa y nos somete y que no se quiebra, sea silencio mas no olvido como dice aquel poema. Que todavía me pienses un poco en este invierno mustio desde tu muralla en la noche estrellada, cuando los espectador...

Los universos se entremezclan

Los universos se entremezclan tus miradas, tus sonrisas cómplices se abren paso entre la amena conversación los amigos, la familia, el crepitar del fuego la noche en buena compañía tus risas, centellas que encandilan Tu cuerpo rozando el mío la caricia involuntaria, tímida, casi secreta hermosa casualidad cerca, muy cerca, en los universos que se mezclan una celebración que celebro el doble porque estás acá te celebro tanto, tu compañía como oasis tus labios de vino tinto llamándome el olor de tu piel que me inunda y me somete, me doblega tu deliberada intención de no peinarte tu imagen sobresaliendo, primus inter pares cuán necesario aparece ahora uno de tus abrazos ese cerrojo perfecto entre besos frutales tu boca sobre mi boca explotando primaveras hojas de cerezo cayendo lentamente como las ropas que lento caen al suelo descubrir tus contornos en la noche mis manos en la nuca, envolviendo mis dedos en tu pelo la cercanía infinita de nuestros labios  tu perfume, tu respiración y...